Cuando trabajo con ejecutivos es muy común encontrar que sus hijos son motivo de especial preocupación. Sus ritmos de vida y las actividades propias de cada quien dificultan la creación de una relación altamente satisfactoria. Ahora, laboralmente hablando, éste tipo de frustraciones afectivas se convierten en interferencias que pueden impactar negativamente sus resultados. Hoy es común encontrar jardines infantiles al interior de las empresas, como una estrategia afectiva para favorecer la productividad.
La distancia emocional que se establece entre padres ejecutivos y sus hijos es tema de estudio en diferentes partes del mundo. Para reducir la brecha, y crear relaciones profundas y satisfactorias, te presento los 5 mensajes del PATROCINIO, un modelo de relación de Coaching que comparto en mis sesiones y que es, además, una herramienta muy poderosa de liderazgo.
El patrocinio tiene que ver fundamentalmente con la posibilidad de DAR APOYO AL CRECIMIENTO PERSONAL, se hace al nivel de la identidad que, según diversas corrientes psicológicas, es aún más profundo que el de los valores y las creencias. Por lo tanto, invertir en esto nuestro tiempo, generará un impacto tremendamente positivo en la vida de nuestros hijos y en su relación con nosotros.
Es nuestra percepción de identidad la que organiza nuestras creencias, nuestras capacidades y nuestros comportamientos, en un mismo y único sistema (nuestra persona). Así mismo, nuestro sentido de identidad nos permite relacionarnos con sistemas mayores de los que formamos parte como la familia, el colegio, el trabajo, la ciudad, etc. De esta manera se construyen nuestros sentidos de “función”, de “propósito”, y de “misión”. Simplificando esto, nuestra percepción de identidad está relacionada con preguntas tales como: “¿Quién soy?”, “¿Cuáles son mis límites?”, “¿Cuál es mi papel?”, “¿Cuál es mi misión?”.
Sin ir más allá, quiero decirte que con algo de atención y total compromiso con tu relación con tus hijos, todas tus acciones con ellos pueden entregar entre líneas los siguientes 5 mensajes del PATRICIONIO EFECTIVO:
- Sé que existes, Te veo. Como insinué en el párrafo anterior, no se trata necesariamente de verbalizar este mensaje. Se trata de entregarlo mediante nuestras interacciones con ellos. Cuando este mensaje está presente la respuesta emocional del niño será sentirse aliviado, relajado, centrado y en paz. No hay nada más agotador que andar por la vida repitiéndose “nadie me ve”, “no existo”.
- Eres valioso: En mi opinión este mensaje es fundamental para desarrollar algunos rasgos de liderazgo que se requerirán en diferentes espacios de la vida. Cuando entregas este mensaje, quien lo recibe se siente satisfecho, lleno de sí, pleno. No entregarlo facilita la sensación de vacío que abre las puertas al desánimo y a la depresión.
- Eres único, eres importante, eres especial: Esta entrega detona la capacidad creativa de la persona, le permite expandir sus ideas sin límites y con la mayor apertura. No recibir este mensaje genera pasividad e instala las creencias: “no soy único”, “No soy nada especial”, “no soy diferente en nada a los demás”. ¿Cuántas posibilidades de crear pueden surgir en medio de estos pensamientos?
- Siempre tienes algo que aportar: La motivación aparece cuando las personas recibimos este mensaje. También una carga extra de energía, para llevar a cabo nuestras acciones e intenciones. Envías este mensaje cuando escuchas con atención; cuando permites que las ideas, por sencillas que puedan parecerte, sean valoradas y puestas en marcha. No ofrecer este mensaje invita a sentirse sin valor y no deseado.
- Perteneces aquí, siempre eres bienvenido: El sentimiento de tribu llega con este mensaje. Cuando lo ofrecemos mediante nuestras actitudes y comportamientos, la persona que lo recibe se siente en casa; siente además lealtad y compromiso. No sentirse parte del grupo provoca desplazamiento, incomodidad e inseguridad.
Sin importar cuantas horas al día trabajes y cuan frustradas sientas tus relaciones con tus hijos, seres queridos y liderados, practica el PATROCINIO. Pon atención a todas tus interacciones con ellos y asegúrate de estar entregando el mensaje correcto. Piensa tú en ¿quién serías si fueras el receptor de estos mensajes?, ¿cómo hubiera sido tu vida pasada y que te esperaría en el futuro?.... ¿Cierto que muchas cosas serían diferentes?
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